EL CLASICO DE SAN PEDRO DE ATACAMA
Adobe, abre sus puertas en agosto de 1997 y desde un principio se transforma en el favorito. Su carta tiene un diseño muy bien pensado, que cubre los gustos de los más foodie, hasta los de un niño, con sabores locales, como el arrope, quinoa, patasca, hojas de coca o deliciosas pizzas, quesadillas y lomo a lo pobre. La fogata es su corazón y con el tiempo se ha convertido en un destino imperdible. Sentimos que el Adobe fue el precursor de la búsqueda de una cocina que crece sabrosa, creativa y con un excelente servicio. Esto no sólo se limita a nuestras preciosas cuatro paredes cubiertas de cerámicas de la artista Tatané Durán, sino que también somos capaces de extenderla a los lugares más lejanos y alucinantes del desierto de Atacama.